En los últimos años podemos encontrar en el mercado colores de moda muy bonitos para pintar el salón, como muchas tonalidades de elegantes grises, beiges y marrones terrosos, verdes Viridiana y pistacho, algunos tonos profundos de azul, como el Prusia u Oxford. Además de estos colores, cobran vida los tonos cálidos como el amarillo mostaza, el rojo borgoña y el rosa viejo.
Además, las tendencias en pintura de interiores van cambiando con el paso de los años, pero es cierto que hay algunos que, por mucho que pase el tiempo, se mantienen. En este sentido, si vosotros estáis pensando en pintar vuestro salón o vuestro hogar, nosotros os recomendamos que recurráis a Pinturas Decolor para que os asesoren acerca de que es lo mejor para vuestra casa, aunque bien es cierto que ya todos sabemos que traer colores de la naturaleza es una forma de mantener alegre un salón y que siempre se mantenga moderno. Por ello, creemos que debes centrarte en el color principal y luego ir combinando elementos de otros colores, manteniendo armonía en la sala sin sobrecargarla. Así, las mejores opciones de tonalidades pasan por:
- Verde Viridiana. Las muestras del Salone del Mobile y la Milano Design Week mostraron mucho color para 2022. Sin duda, una de las tendencias es ir hacia tonos azulados del verde, como el Viridiana. Este es un estilo fresco contemporáneo, que aprovecha los colores blanco, verde Viridiana, amarillo y negro, para conformar un espacio relajante, agradable y sencillo. Es importante destacar que cada color cumple un importante rol en la composición.
- Verde pistacho. También se ven muchos tonos de pistacho, aunque la tendencia es dejar los tonos saturados que se han visto mucho el año pasado, y utilizar tonos de verde más suaves y delicados. Un salón en este tono posee una elegancia ecléctica, característica de la conjunción con un luminoso verde pistacho en la pared, con verde de las plantas, y delicados tonos de grises y beiges.
- Verde y rosa. Si quieres dotar a su salón de colores alegres, puedes utilizar un verde azulado, blanco, rosa y beiges, acompañados de detalles en marrón (como puede ser un mueble), que brinde un cable a tierra, a tantas sensaciones fuertes que percibirá la vista en esta habitación.
- Azul Oxford. Decorar nuestra casa puede ser una tarea difícil. Debemos buscar los colores correctos, ya que la decoración de nuestro hogar es una forma de expresarnos. Añadir toques de color intenso como el azul Oxford puede ser una de las alternativas.
- Azul Prusia. Decorar una sala con colores intensos es una buena opción, sobre todo si los conjugamos con colores neutros. Usar un tono intenso en las paredes y complementarlo con blanco, gris o beiges, compone una explosión de color y agrega estilo a la sala. Elegir un sofá de amarillo mostaza, que contraste con la pared, puede ser otra hermosa composición de color.
- Azul cerúleo. Combinar un color tan sobrio y elegante como el gris oscuro con un azul cerúleo, es una forma moderna y exitosa de agregar color a una sala. Es una forma de agregar color sin arriesgar mucho. El cerúleo también se puede combinar exitosamente con el blanco y beige.
- Rosa viejo. Elegir un color suave como el rosa viejo en la pared y usar otros tonos neutros en el sofá y cojines, es otra forma segura de conseguir un ambiente bonito y poco arriesgado, ya que no hay forma de un resultado fallido. Podemos utilizar colores contrastantes para lograr una habitación interesante. A una pared en color verde azulado se la contrasta con accesorios en un color opuesto como el rosa viejo. El resultado es una habitación alegre, con diferentes colores sin caer en excesos.
- Rosado rubor. Otro ejemplo de cómo agregar color manteniendo armonía en un ambiente. Colores fuertes en cojines y un sillón es una forma segura de un resultado colorido y de buen gusto.
- Amarillo mostaza. La forma de agregar color a un salón no tiene por qué ser solo en paredes. Puedes mantener el salón monocromático y agregar color mezclando tejidos y telas.
- Naranja papaya. Una forma muy segura de agregar color a un salón es elegir un color neutro para las paredes. Luego elegir accesorios en color naranja que combinen y agreguen estilo.
- Rojo escarlata. Combinar el rojo con el blanco, es una forma segura de tener color en una habitación. Para crear armonía en la sala, debes experimentar con formas, texturas y patrones, también agregar un color que logre apagar la habitación, en este caso el blanco.
- Blanco y gris. Los colores neutros arrasan con los halagos, ya que forman una atmósfera acogedora, cálida, pero a su vez intensa y llena de personalidad. Invita a observar más detalladamente, disfrutar de los tonos, e inclusive valorar obras de arte, que por sí solas parecerían faltas de potencial.
- Blanco y beige. Si quieres transitar el camino seguro, pinta el salón de blanco o beige muy suave, y trabaja los muebles en tapices color crema y estructura de madera más oscura. La alfombra puede ser el punto en donde se agregue un color con más fuerza, como puede ser el negro.
Los tonos grises oscuros son la opción ideal para los salones más pequeños
En viviendas pequeñas como las que tenemos la mayoría de nosotros, lo cierto es que se pueden aplicar colores que estén relacionados con la profundidad, como el gris oscuro. El mobiliario puede ser blanco, aunque la mejor idea será inclinarse por un beige, para que no sea tan fría la habitación.