¿Sueles tener como prioridad el alojamiento donde vas a dormir y descansar a la hora de planear tu próximo viaje, o por el contrario eres de los que piensan que no es algo tan importante? Muchas personas se muestran indiferentes a la hora de decidir dónde van a alojarse, ya que centran toda su ilusión y planificación en los sitios que van a visitar y las actividades que van a realizar. Pero en realidad existe una diferencia abismal de satisfacción al finalizar tu viaje según el lugar donde hayas decidido alojarte.
El descanso y la comodidad son primordiales para poder disfrutar tus viajes.
Es un hecho; un buen descanso nos ayuda a disfrutar de nuestros viajes. Cuando viajamos estamos recorriendo un camino (más cercano o más lejano) y todo camino recorrido conlleva un desgaste físico; incluso cuando llevas 10 horas sentado en un cómodo asiento de tren, acabas bastante cansado y con muchas ganas de descansar sin estar en continuo movimiento. Por lo tanto, nuestro cuerpo nos exige relajación y confort automáticamente cuando llegamos a nuestro destino. En algunas ocasiones además necesitamos un descanso mayor, como cuando hacemos parada en algún sitio para al día siguiente retomar nuestro viaje, ya que nuestra mente sabe que aún nos queda tiempo de camino y no se conformará con cualquier lugar. El cuerpo necesita dormir y relajarse para poder estar al día siguiente con las pilas recargadas y disfrutar de las actividades que vamos a realizar.
Además de esto, se ha demostrado que muchos turistas han maldecido sus vacaciones por el alojamiento, ya que a pesar de pasarlo bien fuera de su hotel, cuando han ido a descansar se han visto envueltos en todo tipo de situaciones desagradables, como por ejemplo:
-No conseguir dormir en condiciones por ruidos fuertes y camas incómodas
-Habitaciones y entornos sucios.
-La peor de todas; precios desorbitados a la hora de facturar que sin duda les han fastidian el viaje de forma automática.
Ahora que sabemos que el descanso no debería ser algo negociable nos planteamos la siguiente pregunta: ¿Cómo podemos asegurarnos un buen descanso entonces? La respuesta es: Eligiendo bien nuestro alojamiento.
Existen muchos tipos de alojamientos y la buena noticia es que hay uno para cada tipo de persona. Si elegimos bien, podemos encontrarnos un buen alojamiento adaptado a todas nuestras necesidades a muy buen precio.
El entorno ideal para dormir.
Como ya hemos dicho, no debemos conformarnos con cualquier lugar a la hora de elegir donde vamos a descansar. Ni el precio ni nuestras condiciones son motivos para resignarnos a quedarnos en cualquier lugar, ya que hoy en día hay precios y posibilidades para todo el mundo: Tenemos a nuestro alcance un abanico de hoteles, hostales, habitaciones compartidas y casas rurales que pueden darnos comida, una cama para dormir y todo lo que necesitemos.
Dependiendo de nuestras necesidades y nuestro presupuesto podemos elegir uno u otro mediante una buena investigación previa (y necesaria) a nuestro viaje. Esto siempre será mejor decisión que quedarnos en un hotel elegido a última hora que nos deje una sensación desagradable, como un hotel que nos cobre un riñón por una habitación pequeña o que no acepte a nuestras mascotas.
Como recomiendan en la revista digital 20 Minutos las plataformas que comparan precios y características de alojamientos son muy útiles para ayudarnos a decidir dónde vamos a hospedarnos. En ellas, puedes filtrar tu búsqueda mediante criterios como los siguientes:
- Límite de precio.
¿De cuánto presupuesto dispones? No importa si es un presupuesto ajustado y sois una familia de 4. Según tus preferencias, los comparadores te mostrarán los diferentes tipos de alojamiento disponibles para ti sin problemas.
- Límite de distancia.
Si has viajado en tren o autobús y no quieres desplazarte lejos de la estación, también puedes aplicar la distancia en los filtros. Éstos te pedirán que indiques en el mapa el lugar donde te gustaría encontrar alojamiento y te mostrarán los alojamientos más cercanos.
- Según valoración.
La aplicación puede mostrarte los hoteles o alojamientos en orden de mejor a peor valorados si así lo necesitas. Es algo que se recomienda mucho, ya que gracias a las reseñas y opiniones de otros clientes puedes hacerte una idea de cómo será tu experiencia.
- Según el tipo de servicio.
Puede que estés buscando desayuno, cena o almuerzo incluidos porque prefieres no comer fuera en alguna ocasión. También puedes encontrarte con otros servicios añadidos como garaje incluido, habitaciones que admitan mascotas o incluso uso de baño privado, ya que en muchos alojamientos (sobre todo en ciudades grandes) los baños (e incluso las habitaciones) suelen ser compartidas con otros huéspedes del lugar. El comparador de alojamientos te mostrará qué alojamientos están disponibles con esas características para hacer tu viaje más cómodo. Además de esto, existen varios tipos de alojamientos que puedes elegir para completar la experiencia de tu viaje y hacer que éste sea mejor.
Tipos de alojamientos para tu viaje.
- Hotel.
Los hoteles pueden ofrecer muchos servicios diferentes. Según de su clasificación de estrellas podemos encontrarnos con habitaciones más grandes o más pequeñas, siendo el número 5 la clasificación más alta para un hotel. Los hoteles de menos de 5 estrellas son más pequeños y económicos y pueden ofrecer un buen servicio y calidad a sus huéspedes en todo momento. En cambio, de hoteles de 5 estrellas suelen ser tener precios más elevados y por ello la exigencia ante ellos es mayor, por lo que ofrecen servicios de muy alta calidad.
Entre las habitaciones de los hoteles de 5 estrellas podemos encontrarnos las famosas suites, que tienden a ser las habitaciones más lujosas del hotel. Las suites pueden tener varias dependencias con diferentes servicios como spa o piscina. Puedes encontrar suites incluso en villas vacacionales, como es el caso de la suite Isabela ubicada en Lanzarote.
- Hostales.
Los hostales o pensiones son bastante más económicos comparándolos con otros alojamientos. Lo bueno de un hostal es que puedes encontrarlo tanto en ciudades grandes como en pueblos, mientras que un hotel es más difícil de encontrar en pueblos alejados de las grandes urbes, por lo que los hostales son lugares comunes y confiables para cualquier viajero.
- Apartamentos.
Los famosos pisos en alquiler (o Airbnb) son una opción muy preferida por los turistas hoy en día, ya que ofrecen una estancia en pisos y casas como las nuestras a un precio reducido y con servicios tipo desayuno.
- Casa rústica.
Perfectas para las vacaciones donde buscas el contacto con la naturaleza y una sensación acogedora. Las casas rústicas están diseñadas para aliviar el estrés e incitan a la desconexión. Seguramente encontrarás la mayoría de ellas en pueblos, pero también puedes encontrar hoteles rústicos, donde existen varias casitas con las mismas características ofreciendo todo tipo de servicios relacionados con la naturaleza y viviendo en comunidad. Otro alojamiento similar son los campings, también relacionados con la naturaleza, pero más económicos, en los cuales eliges tu parcela y montas tu tienda de campaña.
En definitiva, existen opciones para todos y es importante conocer bien el lugar idóneo para relajar nuestro cuerpo y mente tras unas vacaciones o un largo viaje de trabajo.
La experiencia completada a través de un buen alojamiento será sin duda gratificante para nosotros, y siempre podremos agradecer el servicio prestado mediante una buena reseña, ya que así ayudaremos a tomar una buena decisión a futuros huéspedes y apoyaremos el crecimiento de un buen negocio. Ellos te lo agradecerán y sin duda ¡saldréis todos ganando!